Cada vez más ciclistas usan la red de carriles bici de Málaga. Y eso es bueno, porque cuantos más ciclistas seamos, más se acostumbran el resto de usuarios de la vía a nosotros, y más seguro es nuestro trayecto. Lo cierto es que cada vez los conductores de vehículos son más respetuosos con nosotros, moderando su velocidad y manteniendo la distancia de seguridad con los ciclistas.

Esto ocurre con la inmensa mayoría de conductores, pero por desgracia hay también quienes siguen pensando que son ellos, y no las normas de circulación, quienes disponen cómo se reparte el espacio de las calles. Es el caso de los conductores que, a sabiendas de estar causando graves molestias a otras personas, aparcan su coche en mitad del carril bici.

https://www.facebook.com/carrilbicimalaga

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Durante los primeros meses tras la construcción de los carriles, habíamos tomado un enfoque comprensivo del asunto: era necesario que pasase tiempo para que los conductores se acostumbrasen, y para que encontrasen alternativas a su antiguo lugar de aparcamiento. Pero, con el paso del tiempo, nos hemos dado cuenta de que algunos conductores no tienen intención alguna de cambiar sus hábitos, e incluso se burlan del ciclista cuando este les llama la atención por la infracción que cometen, y con la que ponen en peligro al resto de conductores y ciclistas que hacen las cosas correctamente.

Por eso, y en vista de que dialogar con este tipo de conductores no sirve de mucho, hemos elaborado este Protocolo de actuación ante coches aparcados en el carril bici. Una serie de pasos sencillos con los que consigues que la probabilidad de que el conductor vuelva a aparcar en el mismo sitio descienda en gran medida. Ahí va:

1. Localiza el coche aparcado sobre el carril bici. Normalmente, te lo topas de frente.

2. Acércate al coche, y exígele a su conductor que retire de forma inmediata su coche de ese lugar, explicándole que pone en peligro a los ciclistas que pasan por allí.

3. Si no lo retira de inmediato, aléjate hasta estar a una distancia prudencial del coche, pero desde donde puedas distinguir claramente el modelo y la matrícula.

4. Localiza en qué calle y número se encuentra el coche.

5. Con tu teléfono móvil, marca el 092 para llamar a la Policía Local. Informa directamente de tu localización, de que hay un coche aparcado sobre el carril bici, y notifícales el modelo y el número de matrícula.

6. Ya puedes seguir tu trayecto con la tranquilidad de que la multa está en camino; y si el conductor se marcha antes de que llegue la unidad de la Policía Local, al menos queda el registro para cuando el conductor reincida. Por otra parte, ocurre a menudo que, en cuanto el conductor te ve con el teléfono en la mano, decide que es el momento de marcharse: la persuasión directa suele ser muy efectiva.

Puede parecer un protocolo bastante contundente, y de hecho lo es: los coches aparcados sobre el carril bici provocan situaciones muy peligrosas para los ciclistas, y es un mal hábito que debemos atajar de la forma más certera posible.